26/6/10

La chica de las horas que se salta los horarios

En verano siempre me pongo a escribir a las cinco y seis minutos de la madrugada porque mi insomnio no me permite estar dormida a esa hora, nunca he entendido el motivo, aunque en parte me encanta. Esa hora me parece mágica, me encanta mirar por la ventana y observar las calles vacias, a estas horas parece como si la ciudad estaría muerta. Empiezo a esa hora y para las cinco y veintiuno termino, aunque me quede en medio de una frase, aunque ni siquiera haya llegado al punto y seguido, siempre termino de escribir a esa hora, y ni siquiera miro el reloj para comprobarlo. Dejo el boligrafo y el papel en el suelo, me tapo con la manta y me duermo. Siempre cuento cinco estrellas y con ellas van cinco deseos, y después de pedir el último, mis ojos se cierran hasta las diez y nueve minutos del día siguiente. Los domingos cuando me levanto me tomo un café calentito, tiene que estar ardiendo. Me encanta que me queme la lengua. Todos los domingos leo durante una hora y cuarenta y siete segundos a la mañana, después de tomarme ese café. Después salgo a la calle sin rumbo fijo, aunque siempre acabo en el mismo lugar. Allí estoy cuarenta y ocho minutos y veinticinco segundos. Luego voy a casa de mi mejor amiga y me apropio de su cocina preparandole siempre el mismo plato, nuestro favorito. Siempre sonreimos a las tres en punto, aunque nos estemos contando lo mal que nos ha ido la semana y las lagrimas resbalen por nuestra cara, a esa hora siempre tenemos una sonrisa pintada en la cara. Será por las cosquillas que empezamos a hacernos a las dos y cincuenta y nueve minutos y cincuenta y nueve segundos. Es el único día que estamos solo las dos juntas, por eso lo pasamos entero juntas. Todas las tardes de domingo vemos una película de las que te hacen llorar, para explotar todo eso que llevamos dentro. Nos sienta tan bien. Hablamos durante cinco horas, treinta y dos minutos y cuatro segundos después de verla y me voy a mi casa a las once y cuarenta y ocho porque es tarde. Los domingos nunca ceno. Enciendo el ordenador y empiezo a hablar con esas personas especiales de mi vida, a las dos y cuatro minutos cuando se va la última, siempre la misma, ella, mi mejor amiga, cogo la camara de fotografias y me pongo a fotografiarme durante una hora y dieciseis minutos exactos. Desde esa hora hasta la hora que me pongo a escribir solo sueño, sueño despierta, sueño sobre lo que escribiré después. Estos solo son mis domingos y aún me quedan por contar el lunes, martes, miercoles, jueves, viernes y sabados pero justo en este mismo instante son las cinco y veintiuno.
Pd: Aunque a veces es bueno saltarse la rutina y los horarios, fijarse en los pequeños detalles que diferencian un día de otro, y ya son las cinco y veintitres. Adoro los domingos sin horas, son incluso mejor que los que he contado.

La chica de las horas.


Este es el cuaderno donde la chica de las horas escribe cada día a las cinco y seis minutos hasta las cinco y veintiuno. Hoy se ha retrasado dos minutos, por ello su domingo ya no va a tener horas. Aunque le llamen la chica de las horas le encanta saltarse sus propios horarios.


Leer lo de "Escribamos".
Espero vuestra opinión :)

23 comentarios:

Mandarina López dijo...

A eso se le llama saber aprovechar el tiempo ;)

S♥. dijo...

a mi tambien me encanta escribir!comparto tu insomio,te sigo(L)

Elendilae dijo...

Chica, me encanta como escribes ^^ te voy a seguir... :) A ver si me inspiro yo un poquito que últimamente ando un poco espesurria... jaja... Un besito, y gracias por pasar!

galmar dijo...

a las seis y dieciocho, minuto arriba o abajo he terminado de escribir y enviar las memorias del curso (ejque soy semiprofe:) y al ver el comentario, he venido a leerte :) y me pica la curiosidad por eso de leer lo de escribamos :) así que le voy a echar un ojo mientras le digo a mi estómago que se porte bien, que últimamente está muy tonto :)
la peli es muy chula, y la escena de la canción me encanta :) biquiñosss

galmar dijo...

me apunto a escribamos, espero a que subas la primera no? la verdad es que nunca he hecho algo así y no sé si mi colaboración servirá de mucho, pero ahora con el verano me parece una día estupenda y creativa :)

While dijo...

Amo como enlazas cada una de las palabras :DD

Jaime dijo...

me gusta muchisimo como escribes que bonito... te sigo.
pasate por el mío
www.masalladelanube.blogspot.com

Fhercho dijo...

me apunto a escribamos
y eso de las horas... la hora con sesenta segundos no existe... o al menos yo la aprovecharia de otra manera :P

Saludos

Raul dijo...

me apunto al escribamos!! cuelga alguna idea y empezemos!! :)

bixitoluminoso dijo...

La chica de las horas tiene algunas semejanzas a mi...

creo que por eso me gusto tanto todo lo que contaste en el texto, es bonito verse reflejada :)

Anónimo dijo...

Pues yo juntaría a tu chica de las horas con mi chica desastre. Sería algo digno de ver, jajaja... Me ha encantado esta chica tan obsesionada con el tiempo, todo tan milimétricamente medido... :)

Un saludo!

La niña que escribió un sueño dijo...

Me gustaría tener tan organizadito el día como la chica de las horas :P
Mis relatos en sus inicios del blog también tenían obsesión por el tiempo, pero supongo que ya no.
Me gustó tu chica de las horas, minutos y segundos :)

Un besito, bonita

Nada más importa dijo...

Me encanta la frase que usas para describirte...

Besos

poetadebotella dijo...

Debes tener un reloj de los mas genial para cronometrar tanto como inviertes tu tiempo!:)
bonito texto
muá

Gabrielle dijo...

Que lindo escribes! Me gusta mucho y tu blog me parece con un look muy tuyo! Así te imagino, quiero leerte poco a poco, quiero saber que hay en los post anteriores. Un beso.

Anónimo dijo...

¡Me encanta!
A mí también me entran ganas de ver películas de llorar cuando estoy triste. xD
¡Un beso!=)

Emi dijo...

me gusto la estrategia de ver peliculas romanticas para aliviar el estres. muy interesante que haga todo estructuradamente, pero estaria bueno que algún día rompa completamente con los horarios para probar algo nuevo, lo rutinario puede llegar a cansar en algún momento.además me da que pensar si es así con lo que hace para descansar, no quiero ni imaginarme lo que hara en el ambito laboral, estudiantil, organización porque a veces ser tan planificadoras trae más qe un dolor de cabeza.
beso grande!!!buena idea la de la historia colectiva.

Nacho dijo...

Lei alguna entrada tuya, me emociono la del baul, es dificil olvidar a alguien que significa muxo, o imposible. Saludos.

Enrojecerse dijo...

he visto que tienes a libros pendientes: la mecanica del corazón.

pd: ya tardas:) es preciosa.

Anna dijo...

Simplemente FASCINANTE!!!!!

anny96 dijo...

olaa
solo comentarte k escribes muy lindo
bss

La Chica del Blog dijo...

Sigo tu blog! ♥
Espero que tu también lo hagas ;)
Un beso :)

Eric dijo...

El tiempo es oro, las horas pasan, pero la vida no tiene sentido si no aprovechas cada minuto. En tu caso bien aprovechado, un abrazo!

Pasate si quieres;)